Misionada~

Corazones descubiertos
esperan la Buena Nueva
La llevamos con canciones, bailes y oraciones,
Debiamos enseñarles a amarlo
Nunca pensé que yo aprendería a amarle más...
Es que conocer tanta gente maravillosa,
Que abrío la puerta de su casa y su corazón para que yo le entregara mi testimonio de fe. ¿Serviría de algo eso? Mi testimonio siempre ha sido inestable y pensé que inútil. Ellos me enseñaron que no era así.
La sonrisa de Yenifer cuando le enseñé a rezar, la alegría de Braian cuando se bautizó, la ternura de Catalina cuando bendecía los alimentos, la fe que me quemó dentro durante 10 maravillosos días.
Lágrimas de amor a Cristo derramadas a diario, en cada liturgia, en cada autoanálisis me demostraban que sentía a Dios más de lo que yo misma creía!
Lágrimas de emoción al momento de la despedida, jamás olvidaré los rostros de aquellos que me gritaron "tía, tía!" o de aquellos que rezaron junto a mi.
Un beso, mi querida Del Carmen, sé que el milagro ocurrirá y todos se reunirán en amor a Cristo a orar en esa humilde capilla. Rezo por que aquello suceda y sé que 11 corazones más también lo piden a gritos!.

He sido misionada.