Y aunque la certeza de todo esto esta ahí, frente a mi, un fantasma continúa persiguiendome. Y corro, corro, corro. Lo esquivo y sigo corriendo. Sigue ahí, detrás de mi, entonces tranquilizo mis pasos y dejo de huir, el fantasma se queda donde está, justo a mis espaldas. Que se quede ahí, a mis espaldas, que me proteja en lugar de asustarme, mientras no se ponga frente a mi y no me deje ver, todo bien.
miércoles, 13 de octubre de 2010
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4 comentarios:
Me encanta.
Muy original princesa.. O niña , nunca se por el nombre del blog como llamarte o si eres la niña o la princesa quizá incluso el caballero!
En fin que me gusta la idea ,la frase de mientras se quede detrás y no se ponga frente a mi y no me deje ver , todo bien.
¿Porque nos debe asustar algo que no conocemos?
O porque no nos puede ayudar?
Es un enfoque diferente y me gusto mucho.
Espero poder leer alguna entrada más pronto :) !
Besos.
Pd: Muchas gracias por pasarte por Piedra lunar.
eme gusta tu blog; a ver si puedes hacerte seguidor-a del mío, que es http://fulltimedeportes.blogspot.com/
Creo que habló la Princesa, me ofresco a que en el corazón al menos podamos dejar al miedo contemplar solo nuestra sombra, así iremos tranquilos hacia la luz, pero teniendo siempre presente que si miramos hacia atrás, quizás el miedo reaparezca
(L)
Fantasmas...hmmm...creo que tenemos muchos por ahi rondando, pero me gusto eso de protegerte en vez de asustarte...
cariños tam¡
Zaphiro
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