Me gustaría que todo fuese más fácil. Esto de crecer es tan complejo! No me gustó, ¡para nada! Me quitaré el maquillaje de mamá y le dejaré los tacos guardados en su closet para que no note que los he usado. Aun que siempre se da cuenta, por que creo que los dejo en posición distinta a la original. El maquillaje no sale... los zapatos me quedan... Parece que es un poco tarde.
Es como jugar a ser grande. Vas a la universidad, lees libros de anatomía y de morfosintaxis, tomas café cada mañana aun que sabes que en la tardesita te dolerá el estómago. Quieres pasear sola por los parques y no depender de la mano de mamá para subir la escalera del resbalín. Quiere maquillarse y coquetear. Sonreír inocente y femenina a la vez. Es como jugar a ser más grande. Querer amar y ser amada en toda plenitud. Querer entragar el corazón en un beso y el infinito amor de Cristo en un gesto. A veces jugar a ser grande es fantástico, es ponerse un taquito alto y ponerse rubor. Otras no tanto, es llorar de angustía o de dolor. Ser grande es dificil y a veces no gusta jugarlo... pero ya estoy metida en el enredo.